Reseña Histórica

La Escuela Adventista de Hualpén, inicia sus actividades en marzo del año 1982, cuando un grupo de profesores y fieles miembros de iglesia llevaron a cabo el sueño: cuando se animaron a funcionar en las dependencias de la iglesia adventista ubicada en calle Patria Vieja,1038 en el sector denominado Hualpencillo. Su primer director fue el Sr. Atanasio Andrade, quien inició el proyecto con los cursos de Kinder, 1° y 2° años de Enseñanza Básica, alcanzando una matrícula inicial total de 65 alumnos. Durante los años siguientes, se sumó el 3° y 4° año básico, que funcionaban como cursos combinados (en una misma sala ambos grupos simultáneamente). Cada año se fueron creando nuevos cursos lo que permitió́ completar la Enseñanza Básica. De hecho, los estudiantes debían salir a la calle para tener sus recreos, debido a que no había un espacio al interior de la “escuela”.

Debido a que las dependencias físicas eran totalmente inadecuadas para albergar a los alumnos, la Secretaria Ministerial de Educación otorgaba diversos plazos para hacer abandono del lugar y llevar la Escuela a un lugar con las condiciones mínimas para un establecimiento educacional. Lo anterior debido a que no reunía las condiciones físicas, como patio y salas acogedoras para el alumnado. Producto de lo anterior mencionado, los alumnos que cursaban 7o año fueron acogidos por el Colegio Adventista de Talcahuano, ubicado en Colón 1165, donde pudieron iniciar y terminar el año escolar de 1987.

Durante ese año y parte del siguiente, la Corporación de la Iglesia Adventista del Séptimo Día adquirió, un terreno bastante más grande, y apropiado para la construcción de una escuela con todas sus letras.

Durante el 2° semestre del año 1988, los estudiantes fueron trasladados al actual establecimiento ubicado en Avenida Curanilahue 415, en la población Lan-C de Hualpén. El establecimiento constaba de un solo piso, construido con cuatro salas, baño para el alumnado, una oficina para Dirección, una Secretaría, y un gran patio…de tierra. En el año 1995 se inaugura la construcción del segundo piso, lo que permite contar con un total de diez salas, ocupadas por dos cursos por nivel, otras oficinas, baños para profesores, biblioteca, entre otras dependencias.

El año 2005 el establecimiento ingresa a la Jornada Escolar Completa (JEC), desde tercero a octavo año básico. Al año siguiente, la escuela aborda la atención de necesidades educativas especiales de los estudiantes, iniciando la atención de alumnos con dificultades de aprendizaje (TEL).

Durante el año 2008 se firma convenio de Igualdad de Oportunidades y Excelencia Educativa para trabajar bajo los criterios y compromisos que declara la Ley 20.248 de la Subvención Escolar Preferencial (SEP), facilitándose el acceso, la permanencia, la continuidad y la obtención de un aprendizaje de calidad en lo que respecta a una mejora de los resultados académicos de los estudiantes. Hasta la fecha la escuela sigue suscrita a este compromiso.

El año 2009 la escuela inicia la implementación de tres importantes proyectos: Centro de Recursos del Aprendizaje (CRA) que le permite a la escuela recibir recursos didácticos para el incentivo de la lectura de los estudiantes, el Proyecto ENLACES, que mejora el equipamiento tecnológico de la escuela y entrega capacitación a los docentes y el Proyecto de Integración Educativa, iniciando su trabajo con una matrícula de 59 alumnos con trastornos del lenguaje, desde kínder a cuarto básico.

El año 2010 se solicita ampliación de cobertura para atender a los alumnos que presenten otro tipo de dificultades, ya sea transitorias o permanentes, según lo permite el decreto supremo 170 de la Ley 20.201.

Debido al terremoto ocurrido el 27 de febrero del año 2010, muchas familias perdieron sus hogares y/o fuentes de trabajo. Nuestra escuela no fue la excepción, siendo afectada por este sismo de grande envergadura, quedando parte de ella inhabilitada para la entrega del servicio educacional; por lo cual se trabajó ese año en doble jornada y para su reparación en conjunto con el sostenedor, se postuló a dos proyectos del Ministerio, adjudicándoselos y utilizados los veranos del 2012 y 2013, para la obra de remodelación.

La Escuela Adventista de Hualpén se ubica en un entorno socialmente vulnerable. Frente a esta realidad, los padres manifiestan que el establecimiento pasa a constituir un lugar de refugio para el alumnado, ya que, destacan la fuerte formación valórica y espiritual, que trasciende hasta sus familias.

A pesar del nivel socio-cultural de las familias de los estudiantes es poco significativa la deserción escolar. Por el contrario, se observa una gran valoración de la mayoría de los padres a favor de la educación integral impartida por el establecimiento.

Actualmente cuenta con un total de 20 cursos desde Prekinder a 8° año básico. Existe además un equipo multidisciplinario compuesto por psicólogas educacionales, fonoaudióloga, psicopedagogos, trabajadores sociales, entre otros; permitiendo brindar un estilo de educación centrada en los estudiantes y preocupado por el avance académico de estos, como también del desarrollo personal; potenciando sus habilidades y actitudes.

El equipo directivo, personal docente y asistentes de la educación, posee un alto grado de compromiso con la Educación Adventista formando así́ estudiantes con principios y valores acordes al Sistema Educativo, favoreciendo el desarrollo integral del estudiante a través de la realización de talleres artístico-culturales, deportivos, entre otros fundamentados en el acompañamiento del proceso de enseñanza – aprendizaje.

Para el logro de lo anterior se ha trabajado en forma colaborativa en conjunto con toda la comunidad educativa en alcanzar las metas propuestas al comienzo de cada año escolar; llegar a alcanzar la excelencia académica y autonomía. Sin embargo, a pesar de los logros obtenidos, creemos que es necesario todavía dedicar mucho esfuerzo y energías para seguir avanzando, pues estamos convencidos de haber sido privilegiados actores de una tarea que, creemos, es de origen divino: llevar a nuestros estudiantes y sus familias a una educación que acerque a nuestra comunidad al ideal que soñamos: vivir con excelencia en este mundo y preparándonos para vivir la eternidad.